miércoles, 25 de febrero de 2015

El comienzo de una Nueva Gran Guerra

Desde el término de la Segunda Guerra Mundial se habla del advenimiento de una nueva “Gran Guerra”: la “Tercera Guerra Mundial”, sin embargo, han pasado muchos años y no existe un evento con las dimensiones necesarias para ser denominado así, lo cierto es que a pesar de ello ha habido muchos sucesos bélicos que demuestran que la humanidad no se encuentra libre de las calamidades de la guerra.  


Muchos han tratado de descifrar cuando comenzará la Tercera Guerra Mundial, algunos han escrito libros al respecto, otros tantos sólo cumplen con dar advertencias, no obstante, hemos sido testigos de que ninguna guerra por inmensa que parezca ha podido alcanzar ese pesado título, esto no significa que no habrá enfrentamientos bélicos de magnitudes mayores entre Estados o entre hombres. Que los intentos de advertir una nueva guerra en el horizonte hayan parecido errados no quiere decir que no estén en lo cierto, posiblemente las formas en las que se imaginaban la guerra no sean las mismas como las imaginamos ahora, la distancia tecnológica entre la segunda mitad del siglo XX y la primeras dos décadas de nuestro siglo son inimaginables, por tanto. los desastres de la guerra pueden ser mucho más destructores de lo que hemos conocido, sin embargo ¿puede esa sola idea lograr que los líderes mundiales ignoren la pretensión de la guerra? dudaría de una respuesta afirmativa.  El instinto nato del hombre a la guerra solo puede ser sosegado por la razón, advertiría Kant, pero la pura razón no ha sido instrumento suficiente para dominar la voluntad que desea controlar más recursos, controlar más hombres, alcanzar un mayor poderío.  

Han pasado ya poco más de cien años desde que comenzó la Primera Guerra Mundial, y más de medio siglo desde que terminó la Segunda Guerra Mundial, el inicio de la Tercera Guerra Mundial es inminente, la razón no radica en que haya pasado demasiado tiempo y se requiera una nueva guerra, las guerras nunca son requeridas, sino porque los cimientos sobre los que se forjó la paz de esas guerras hoy se encuentran en crisis, la ONU se ha desacreditado día a día con sus resoluciones incumplidas; el FMI y el BM pierden legitimidad ante el mundo, hecho que a propiciado el nacimiento de un nuevo banco de talla mundial: el banco de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica por su acrónimo) el Nuevo Banco de Desarrollo como lo llamaron desde su nacimiento el año pasado; la crisis de 2008 iniciada desde los grandes bancos estadounidenses ha dejado una gran grieta sobre las finanzas y la economía mundial, que sólo ve signos de crecimiento sobre otras latitudes del globo, las cuáles no son tierras occidentales. En conjunto, éstos son algunos de los síntomas del debilitamiento de un poder más grande, el fin de la hegemonía de Estados Unidos. Discutir sobre ello es entrar en debates desgastados, los que aceptan el fin de la hegemonía de Estados Unidos y los que aún creen que tiene el poder para sostenerse como esa gran entidad hegemónica, me abstendré de discutir al respecto, sólo diré que a pesar haber perdido algunas de sus fortalezas, Estados Unidos sigue siendo la entidad ha vencer si alguien pretende levantar el estandarte de la Hegemonía. Aún posee los recursos, las estrategias, los ejércitos y la tecnología para hacer una "Nueva Gran Guerra", y quién desate las fuerzas de ese enorme dragón herido, será quién de inicio a la Tercera Guerra Mundial. 


Escrito por Susana Guadalupe Alarcón Vázquez